Protección contra explosiones

La definición tradicional de protección nos indica que protección es la acción y efecto de proteger (resguardar, defender o amparar a algo o alguien). Podemos decir que la protección es un cuidado preventivo ante un eventual riesgo o problema. La protección contra explosiones es un campo en el que debemos estar preparados y en Electrotel disponemos de la tecnológia necesaria.

 

Muchas de las tareas de automatización en zonas con peligro de explosión sólo se pueden resolver con una detección de posición fiable. Por ejemplo, de la supervisión de cilindros hidráulicos o cilindros neumáticos, la inspección de válvulas de control hidráulico o neumático, así como de la detección del nivel de llenado.

 

En Electrotel contamos con una línea completa en soluciones de protección contra explosiones incluyendo la certificación ATEX, válvulas de explosión sin llama, explosión de ventilación, sistemas de supresión de explosiones, sistemas de seguridad contra explosiones, y detectores de explosión. Tenemos un centro de pruebas de explosión para poner a prueba los materiales de acuerdo con la norma ASTM para asegurar la mejor solución para sus necesidades.

 

Motivos para la protección contra explosiones en vigilancia

 

Una zona peligrosa tiene una atmósfera explosiva definida como una mezcla de sustancias inflamables con oxígeno. En unas proporciones que pueden explotar con calor o chispas.

 

Zonas susceptibles de Protección contra explosiones

 

Es por ello necesario identificar en primer lugar las sustancias presentes capaces de generar atmósferas explosivas. Estas pueden ser:

 

  • Gases inflamables como el hidrógeno.
  • Líquidos inflamables como la acetona.
  • Líquidos combustibles como el aceite térmico.
  • Sólidos combustibles como la harina.

 

Estas sustancias pueden estar presentes en el lugar de trabajo de diversas maneras. En primer lugar y las más fáciles de identificar, debido a su empleo en el proceso productivo -como el caso de gas natural empleado en cocinas y calderas-, pero también podemos encontrarnos casos en los que inicialmente no estaban presentes estas sustancias, pero se han generado durante el proceso productivo. Ejemplos de dicha situación serían el metano generado en los digestores anaerobios de las depuradoras de aguas residuales o el serrín generado en el corte de madera.

 

Otro aspecto fundamental a considerar para la identificación de sustancias capaces de generar atmósferas inflamables son las condiciones de operación, pues como veremos a continuación con dos ejemplos pueden ocasionar atmósferas explosivas de sustancias que a priori no las consideraríamos.

 

En distintos sectores industriales encontramos el empleo de aceite térmico que permite la trasferencia de calor tanto en sistemas calientes como en fríos con unos rangos de aplicación de -30 hasta más de 300ºC según el tipo de aceite. En aplicaciones a temperatura ambiente o inferior, los aceites térmicos no generan atmósferas explosivas, pero si se emplea a temperaturas suficientemente elevadas, puede alcanzar o superar su punto de inflamación a partir del cual el líquido inicialmente inocuo es capaz de generar una cantidad suficiente de vapores que en contacto con el aire generan una atmósfera explosiva.

 

Clasificación de zonas para la protección contra explosiones

 

La clasificación de zonas es un método para analizar y clasificar el entorno donde puede aparecer una atmósfera explosiva, y de esta forma facilitar la correcta selección e instalación de aparatos que garanticen el nivel de seguridad adecuado, conforme también al Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT).

 

En la mayoría de procesos donde intervienen sustancias inflamables, resulta difícil garantizar que no se van a producir nunca atmósferas explosivas. Es igualmente difícil garantizar que los equipos instalados en las áreas de influencia de esas atmósferas explosivas no se puedan convertir en potenciales fuentes de ignición.

 

Por ello la clasificación de zonas es un método para analizar y clasificar el entorno donde puede aparecer una atmósfera explosiva, y de esta forma facilitar la correcta selección e instalación de aparatos que garanticen el nivel de seguridad adecuado, conforme también al REBT.

 

Atmósferas explosivas originadas por mezclas con aire de gases, vapores o nieblas:

 

En el caso de atmósferas explosivas originadas por mezclas con aire de gases, vapores o nieblas las zonas se pueden clasificar en:

 

Zona 0: emplazamiento en el que una atmósfera explosiva de gas, vapor o niebla está presente de forma continua o por largos periodos de tiempo.

Zona 1: emplazamiento en el que es probable que aparezca una atmósfera explosiva en funcionamiento normal.

Zona 2: emplazamiento en el que no es probable que aparezca una atmósfera explosiva en funcionamiento normal, y si aparece es probable sólo de forma infrecuente y en periodos de corta duración.

 

A partir de la evaluación de riesgos, se presentarán las medidas que se imponen para la protección contra explosiones. Estas pueden ser del tipo medidas técnicas u organizativas.

 

La evaluación de los riesgos en la protección contra explosiones

 

La evaluación de los riesgos (ER) en emplazamientos con riesgo de ATEX es un requisito legal que debe cumplir cualquier empresario que sea titular de instalaciones en las que se utilicen sustancias que puedan originar este tipo de riesgo. En general, la evaluación del riesgo de explosión se centra, en primer lugar, en la posible formación de ATEX peligrosas y en la existencia y activación de fuentes de ignición. La consideración de los efectos es una etapa posterior del proceso de valoración.

 

a) La probabilidad de formación y la duración de atmósferas explosivas.

b) La probabilidad de la presencia y activación de focos de ignición, incluidas, las descargas electrostáticas.

c) Las instalaciones, las sustancias empleadas, los procesos industriales y sus posibles interacciones.

d) Las proporciones de los efectos previsibles.

 

Medidas para la protección de explosiones

 

a) Valorar las medidas ya existentes en las áreas, y destinadas a minimizar los niveles de riesgo asociados a las instalaciones, evaluando si son adecuadas a los niveles de riesgos, así como a la clasificación de zonas atex.

b) En caso de que no existieran medidas previas en algún área, o que las mismas fueran susceptibles de ser optimizadas, definir medidas adicionales necesarias a ser adoptadas determinando y definiendo los requisitos a cumplir en cada área.

 

Existen 3 tipos de medidas:

  • Medidas organizativas para la protección contra explosiones
  • Medidas en los lugares de trabajo para la protección contra explosiones
  • Prevenciones técnicas de protección contra explosiones

 

Se usan diferentes técnicas de protección para las zonas peligrosas en protección contra explosiones

  • Inmersión en aceite
  • Cierre lleno de polvo
  • Encapsulación
  • Sellado

 

¿Cómo podemos ayudarle en la protección contra explosiones?

 

Ofrecemos los servicios necesarios para acometer la certificación ATEX de los mismos y así cumplir con los requisitos del RD 400/1996, transposición de la directiva 2014/34/EU.

 

  • Evaluación de los riesgos de ignición
  • Determinación del modo de protección requerido
  • Definición y revisión de normativa de aplicación
  • Evaluación de la conformidad con el modo de protección definido
  • Definición de medidas a adoptar para satisfacer los requisitos
  • Elaboración de Expedientes Técnicos
  • Aseguramiento de calidad de la producción
  • Tutela del proceso de certificación ante Organismo Notificado (si procede)

 

Cámaras con protección contra explosiones

 

Ofrecemos varios productos de la reconocida marca Axis Comunications que permitirán la videovigilancia de las zonas de riesgo, un aporte sumamente importante a la hora de llevar a cabo la protección contra explosiones de cualquier empresa o compañía que requiera prevención en ‘zona crítica’.

 

Ventajas de nuestras cámaras:

  • Fácil instalación
  • Bajo peso con carcasa de aluminio
  • Fácil montaje en altura
  • Fácil configuración de la imagen
  • Certificación contra peligros
  • Fácil conexión
  • Amplia gama de temperatura (-40/-50 °C a 60 °C)

 

Si aún tiene dudas de si debería realizar instalación de protección contra explosiones en su empresa póngase en contacto con nosotros y con gusto responderemos a todas sus consultas.